Las operaciones de fabricación y distribución en la actualidad enfrentan una presión competitiva sin precedentes. El desafiante mercado laboral, los crecientes costos de los bienes inmuebles para fines comerciales y el crecimiento del comercio electrónico son algunos de los factores que se combinan para obtener mayor eficiencia. Con el objetivo de aprovechar al máximo los recursos disponibles, las compañías invierten en automatización, ajuste de flujos de trabajo, recopilación de datos y cualquier otro sistema que pueda ofrecerles competitividad.
Pero, ¿qué sucede con la alimentación para montacargas?
La alimentación eléctrica adecuada que elija para un montacargas puede ser fundamental para mejorar la eficiencia operativa. Las diferentes fuentes de alimentación exigen diversas cargas en la mano de obra al momento de reemplazar, cargar y reabastecer. Requieren diversas cantidades de espacio para alojar la infraestructura de reabastecimiento, carga y cambio; además incluyen diferentes costos por adelantado y a largo plazo.
De hecho, un cambio en la fuente de alimentación, por lo general, puede brindarle información sobre las mejores maneras de invertir en tecnología adicional para optimizar sus operaciones. Ahora, la pregunta es cómo identificar si usted necesita una fuente de alimentación alternativa y qué tipo es el mejor para su empresa.
Estas seis señales indican que debe reevaluar la alimentación de los montacargas.
- Productividad por debajo de los niveles estándar
Las estructuras de las flotillas de montacargas están diseñadas y balanceadas para alcanzar objetivos operativos críticos, pero la producción real no siempre es suficiente para cubrir la demanda. La causa de esto podría encontrarse en una fuente de alimentación de gran demanda o en una que presente niveles decrecientes de productividad.
Por ejemplo, algunas baterías pierden la funcionalidad total una vez que alcanzan un agotamiento del 50 por ciento. Por lo tanto, sus operaciones se llevan a cabo a una capacidad plena solo la mitad del tiempo, y esto puede provocar un cuello de botella en los procedimientos de carga. Los operadores pueden terminar perdiendo demasiado tiempo en los procedimientos de carga y cambio que resultan complejos y demandantes. Su operación ahora se hace de dos formas, combinando la reducción de la productividad con los costos generados por las actividades no productivas.
2. Exceso de fuentes de alimentación
No contar con la cantidad suficiente de equipos para cubrir la demanda constituye una situación terrible. Tener equipos suficientes pero dejar varios montacargas ociosos debido a la falta de fuentes de alimentación disponibles es aún peor. La opción natural es acumular más fuentes de alimentación para aliviar este problema, pero hacerlo para equipos que no son necesarios tiene sus desventajas. Se deberá contar con más espacio en lugares ya reducidos y posiblemente ejercer presión sobre presupuestos acotados para fuentes de alimentación que puede provocar o no un aumento de la productividad.
Entonces la pregunta es, ¿cómo encontrar el equilibrio adecuado? Si la relación entre fuentes de alimentación y montacargas es de dos o más, ya sea por fiabilidad o cortos períodos de uso, entonces es tiempo de evaluar otras opciones. Las desventajas en cuanto a costos y espacio de contar con una gran cantidad de fuentes de alimentación adicionales son demasiadas en este punto. Cambiar a una opción de alimentación más relevante no solo minimizará los problemas de almacenamiento, sino que también le permitirá evitar períodos de inactividad innecesarios y condiciones de trabajo peligrosas.
3. Espacio insuficiente
Como se menciona en el punto anterior, el espacio es un lujo que no se puede desperdiciar. Las operaciones deben encontrar espacio de almacenamiento adicional en un mercado donde los costos comerciales y de almacenes continúan aumentando. En busca de mayor capacidad, muchos administradores reevalúan el uso del espacio existente y dónde se puede optimizar, lo que incluye la infraestructura de reabastecimiento.
Algunas fuentes de alimentación requieren estaciones de reabastecimiento que se puedan ubicar en el exterior, para dejar intacto el lugar en el interior que genera ingresos. Por otro lado, algunas opciones de alimentación requieren un importante espacio interior para almacenamiento, carga y cambio.
Por ejemplo, los montacargas de una aplicación de tres turnos, las 2424 horas, los 7 días de la semana, que utilizan baterías de plomo y ácido, requieren hasta tres baterías por día. Un ciclo constante de una en uso, una en carga y una en enfriamiento. De la misma manera, el gas licuado del petróleo (GLP) demanda un tanque por turno y se acumulan las dos unidades de alimentación de más para una aplicación de tres turnos, pero también se requiere espacio adicional para los tanques vacíos en espera del intercambio.
Algunos podrían pensar que la necesidad de ocupar espacio interior o acumular fuentes de alimentación de más es simplemente inevitable y forma parte del negocio. Al reevaluar la alimentación de los montacargas puede resultar evidente que existen otras opciones disponibles. La mayoría de las veces, son menos costosas a largo plazo y permiten recuperar una significativa cantidad de espacio para sus operaciones.
4. Reducción en la eficiencia de la mano de obra
Con una baja tasa de desempleo, es difícil encontrar buenos empleados y es más difícil mantenerlos. Las operaciones ahora deben aprovechar al máximo la mano de obra con la que cuentan. Hacer el complejo mantenimiento de las baterías, la carga y el reemplazo hasta simplemente alimentar los montacargas es un enorme golpe a la productividad.
Retirar y reemplazar una batería de plomo y ácido gastada por una nueva suele demorar entre 15 y 20 minutos. Posiblemente se demore más tiempo si los operadores deben recorrer cierta distancia hasta la estación de carga o esperar en fila debido al espacio limitado. Como perjuicio adicional, numerosas operaciones incluso pueden limitar el tiempo de carga por medio de un estricto cronograma de carga como una manera de evitar multas en los costos de los servicios públicos durante las horas pico.
Todo esto se puede evitar. Ciertas fuentes pueden ser reabastecidas en tan solo tres minutos. Otros incluso permiten procedimientos de carga versátiles por el cual el operador carga a través de un tomacorrientes estándar cada vez que tenga un minuto libre. Al tener un sistema de carga que consume menos tiempo de los empleados, no solo se evitan períodos innecesarios de inactividad sino que evita que el empleado se dedique a tareas no especializadas que pueden provocar daños a la moral.
5. Fallas prematuras o alquileres de equipos
Uno de los puntos más importantes a considerar al elegir una fuente de alimentación es determinar cuál será el verdadero costo a largo plazo.
Un costo de adquisición más barato no siempre significa pagar menos en total. Varias fuentes requieren una amplia infraestructura de abastecimiento y carga, además de generar costos que pueden acumularse con rapidez. Estas mismas fuentes también pueden experimentar fallas prematuras que provocan gran incertidumbre por los costos de reemplazo. Los hábitos de carga de batería y un mantenimiento del motor deficientes constituyen las causas principales de los reclamos por incumplimiento de garantías.
Para obtener el valor total del ciclo de la garantía de una batería de ácido y plomo, los operadores deben usar la carga disponible completa y luego recargar hasta el 100 por ciento de la capacidad. Todo pausa de carga adicional, como una pausa para el almuerzo del 45 al 52 por ciento, se cuenta como un ciclo. Al hacer esto se corre el riesgo de ocasionar efectos adversos, incluso la reducción de la capacidad y vida útil de la batería.
Además, como las baterías de ácido y plomo se degradan al llegar el final del turno, el montacargas se sobrecompensará debido a la falta de alimentación. Esto produce una pérdida de calor adicional que sobrecarga de manera innecesaria al motor, el chasis y los sistemas hidráulicos, lo que podría provocar desperfectos en el equipo con una mayor frecuencia.
Para evitar una degradación de este tipo y compensar las limitaciones de la flotilla, algunas operaciones alquilan montacargas para cubrir los picos de alta demanda. Estos equipos temporarios solo acumulan gastos y ocupan espacio adicional, lo que se podría evitar al hacer que los montacargas funcionen al máximo de potencia durante todo el turno.
6. Nuevas reglamentaciones sobre emisiones e higiene
Algunos estados cuentan con reglamentaciones sobre salud y emisiones más estrictas que otros. Incluso las organizaciones en estados con reglamentaciones menos estrictas pueden considerar soluciones alternativas para adelantarse a los posibles cambios en las leyes.
El desafío es mantener el desempeño y evitar multas y otras sanciones. Para las industrias que trabajan con alimentos, bebidas y productos farmacéuticos, este desafío se combina con las normas de higiene adicionales, que incluyen los contaminantes que se encuentran en el aire. Por último, las iniciativas sustentables, por lo general, se generan de arriba hacia abajo, lo que hace que los gerentes traten de encontrar maneras razonables de implementarlas en el campo.
¿Cuáles con las fuentes de estos contaminantes que no cumplen con las normas? Los motores de combustión interna, diésel, gasolina, GLP, son los sospechosos habituales, pero tal vez nos sorprenda que no todas las opciones eléctricas son sumamente limpias. Como parte del mantenimiento habitual, las baterías de ácido y plomo liberan gases que pueden contaminar productos sensibles y violar los estándares de emisiones.
¿Cuáles son sus opciones?
El mercado de las fuentes de alimentación para los montacargas ahora es más sólido y diverso que antes. Con nuevas tecnologías como las baterías de placas delgadas de plomo puro, las celdas de combustible de hidrógeno y las baterías de iones de litio ahora probadas en el campo, ahora hay soluciones más afinadas que nunca para abordar sus necesidades.
Tomar la decisión correcta requiere analizar los requisitos exclusivos y las presiones competitivas que enfrenta cada operación. El socio adecuado tiene conocimientos de las aplicaciones de montacargas y de todas las opciones de alimentación disponibles pero sin adherirse a una solución específica. Se mostrará leal a usted y a sus necesidades, y tomará una decisión que considere la más amplia variedad de opciones de alimentación disponibles. Se basa exclusivamente en las necesidades operativas.
Trabajar con el equipo del Departamento de Apoyo a Productos de Papé Material Handling ofrece la variedad más amplia de la industria en cuanto a opciones de alimentación y conocimiento para relacionar las operaciones con las mejores soluciones de alimentación para su aplicación específica.
Para consultar a un especialista del Departamento de Apoyo a Productos, acérquese a la sucursal de Papé Material Handling más cercana. Para evaluar las posibles opciones de alimentación para su flotilla en línea, haga la prueba de Hyster o Yale Power Match. Esto podría darle una mejor idea de las opciones de alimentación a evaluar antes de consultar con
Apoyo a Productos
Además, Papé ofrece una variedad completa de soluciones y de alimentación. Estos servicios incluyen todo, desde la compra de equipos usados y nuevos, y el diseño de almacenes hasta la automatización, el manejo de la flotilla y el mantenimiento constante. Esto significa que podemos ayudarle a optimizar cada aspecto de las operaciones de manipulación de materiales e incorporar soluciones con facilidad según sea necesario. Para conocer la lista completa de servicios y apoyo disponible, visite nuestra página del Departamento de Apoyo a Productos.